Un nuevo estudio de la Universidad de California y TU Munich de Alemania revela que los precios de las baterías está bajando más rápido que el de las tecnologías fotovoltaica y eólica. El estudio muestra que, como no podía ser de otra manera, el gasto a largo plazo en I + D en el sector del almacenamiento eléctrico ha jugado un papel crucial en la reducción de costes.
Según el informe publicado en Nature Energy, los proyectos de almacenamiento de energía podrían reducir el coste por kWh de una batería de litio desde los 10.000 dólares / kWh a principios de los años 90 a los 100 dólares / kWh en 2019.
Si se confirman estas cifras, indicaría que los precios de las baterías de iones de litio están bajando más rápido que las tecnologías fotovoltaica o eólica y que la nueva combinación de energía solar, eólica y de almacenamiento pronto podrá competir con el coste de las plantes de carbón y de gas natural. De hecho, en algunas islas ya lo hace.
Sin embargo, la investigación destaca que conseguir el objetivo de 100 dólares / kWh e incluso precios inferiores puede verse amenazado por una reciente falta de inversión en I + D. Según el estudio los gastos federales de I + D en los Estados Unidos han disminuido en las últimas cuatro décadas de aproximadamente un 1,2% del PIB a un 0,8%.
Debido a la influencia de los cambios en las políticas de I + D, los científicos han desarrollado un modelo de curva de aprendizaje de dos factores para analizar su impacto en el coste de las tecnologías de almacenamiento, que incluye los volúmenes de producción y la actividad de patentes. Este modelo, según el equipo de investigación, explica la reciente bajada de los precios de las baterías mejor que los modelos convencionales.
Utilizando este modelo de dos factores, los científicos han concluido que el gasto a largo plazo en I + D y la innovación son cruciales para la reducción de los costes. Hasta ahora se creía que la economía de escala era más crucial, pero la investigación todavía tiene demasiado peso, principalmente en la búsqueda de nuevas tecnologías de almacenamiento en baterías. "Nuestro marco describe la innovación como el componente más crítico en la reducción de costes, más aún que el despliegue tecnológico", concluyó el equipo de investigación en su informe.
Para finalizar, el estudio hace hincapié en la necesidad de investigar más sobre las nuevas tecnologías de almacenamiento, alegando que actualmente no existe una tecnología dominante y que existe una amplia gama de opciones aparte de las baterías de iones de litio. "Hay espacio para que una serie de baterías de diferentes compuestos químicos proporcionen diferentes servicios a una red en evolución, algunas para la regulación del voltaje de suministro y control de frecuencia, y otras para las interrupciones de larga duración y para proporcionar respaldo del suministro en los edificios y comunidades" .
Fuente | PV-Magazine
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