La evolución de las energías renovables no sólo arrastra una reducción de las emisiones, o una reducción en algunos casos de la dependencia energética. También supone una fuente de nuevos empleos muy potente.
Un ejemplo nos llega desde uno de los países que ha decidido que en vez de ponerle palos en las ruedas, era mejor incentivar la instalación de energías renovables. Estados Unidos. Y los datos parece que están dando la razón a los norteamericanos, que están empezando a recoger los frutos de su apuesta.
Según un informe, en estos momentos sólo la industria de la energía solar da trabajo a 208.000 personas en Estados Unidos. Una cifra que supera a la extracción del petróleo y gas, 185.000 personas, y del carbón, 190.000 trabajadores.
Y la diferencia no hará más que incrementarse en los próximos años. mientras que Gas, petróleo y carbón afrontan descensos en su demanda de empleados, fuentes como la energía fotovoltaica disfrutan de unas previsiones de crecimiento del 15% anual, con una expectativa de alcanzar una masa laboral de 240.000 empleados a finales de este año.
Según Adnan Amin, director general de la agencia internacional de energías renovables, IRENA. "El crecimiento continuado del empleo en el sector de las energías renovables es muy importante, ya que contrata con las tendencias negativas en el resto del sector de la energía. Este incremento está siendo impulsado por la disminución de los costes de las energías renovables, además de los marcos normativos favorables".
A nivel global las energías renovables en su conjunto ya dan empleo a 8.1 millones de personas en todo el mundo. Un incremento respecto a las 7.7 millones que trabajaban en 2014, y una cifra que los expertos esperan alcance los 24 millones para el año 2030.
Por mercados, China es de largo la que más trabajadores tiene en este sector de las energías renovables, con 3.5 millones. Le sigue Brasil, con 918.000, y Estados Unidos, con 769.000. Es llamativa la apuesta asiática por este sector, donde ocupan el 50% del mercado.
Por segmentos, la solar fotovoltaica es de largo la que más trabajadores emplea, con 2.7 millones. Le siguen los biocombustibles, con 1.6 millones, la eólica, con 1 millón de empleados, y la solar térmica con 939.000 trabajadores.
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