La petrolera noruega Statoil, con una participación mayoritaria del gobierno, ha publicado un estudio donde profundiza sobre el futuro energético, y sobre las posibilidades de cumplir con los objetivos de emisiones marcados durante la pasada Cumbre del Clima de París.
Según este estudio, lograr cumplir con los objetivos de París sólo será posible mediante un rápido cambio en sectores como el de la producción eléctrica, pero también en el transporte privado.
La petrolera afronta el futuro con optimismo, incluso a pesar de dibujar varios escenarios, cada uno representando un nivel de evolución necesaria para adaptarse a la realidad del mercado. Un optimismo que expresan con la seguridad de que a pesar del incremento de la eficiencia de los vehículos, y el aumento imparable de las energías renovables, el aumento de la población hará que a mediados de siglo la demanda de gas y petróleo apenas ha bajado ligeramente.
Renault-Nissan Alliance at COP21 Pero desde Statoil ya se preparan para escenarios más agresivos. Uno de ellos supone que para 2040, 9 de cada 10 coches que se vendan serán eléctricos. Una tasa que será la necesaria para acercarse a los objetivos marcados en París y que para lograr hará necesarios un cambio radical tanto en el sector eléctrico, la evolución de la propia tecnología de las baterías, así como también la puesta en marcha de políticas favorables que aceleren eL proceso.
Desde la petrolera también se pone la atención de la urgente necesidad de reducir las emisiones contaminantes, indican que incluso el acuerdo de París no será suficiente para lograrlo, y para ello además de reducir sus emisiones en la extracción, también están diversificando hacía las energías renovables.
Según el vicepresidente senior y economista jefe de Statoil, Eirik Wærness. “Las emisiones deben ser reducidas, al mismo tiempo la energía debe ser suministrada a una población en crecimiento. Statoil está bien posicionada para ser un importante proveedor de energía también en una sociedad de bajas emisiones. Nuestra producción de petróleo y gas tiene el nivel más bajo de emisiones en el mundo, y estamos elevando nuestras ambiciones para mantener nuestra posición de liderazgo. También estamos desarrollando gradualmente nuestro negocio en el segmento de las energías renovables y otras soluciones de bajas emisiones“.
Vía | FCE
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