El banco de inversiones Credit Suisse ha enviado un informe a sus clientes donde se pone sobre la mesa lo que parece puede convertirse en un problema. La compra de SolarCity por parte de Tesla.
Según los expertos del banco, Tesla ha realizado una oferta de compra de acciones muy a la baja, ofreciendo apenas 2.800 millones de dólares. Algo que ha motivado que el banco haya decidido devaluar las acciones de SolarCity de muy buenas, a neutrales, pasando de los 38 dólares a los 27 dólares.
Según los analistas, esta operación será buena para SolarCity, que se beneficiará de un incremento en el precio de unas acciones que no han parado de bajar en los últimos años, mientras que Tesla se verá perjudicada. Pero al mismo tiempo Tesla logrará hacerse a precio de saldo una empresa que Credit Suisse valora en unos 3.700 millones de dólares.
Pero SolarCity es una empresa en crecimiento, con una fuerte deuda. En estos momentos se estima que esta alcanza los 3.000 millones de dólares, que no parece demasiada. El problema es que el modelo de negocio de SC es principalmente de entregar los equipos solares sin coste para el usuario, que lo va pagando con el ahorro en la factura de la luz, lo que suponen entre 3.000 y 4.000 millones de dólares más inmovilizados.
Detrás de todo está una empresa como SolarCity con dificultades económicas, pero que crece a un ritmo sostenible, y en el otro Tesla, que no pasa dificultades, pero tampoco gana dinero, pero crece también a un ritmo importante. Dos modelos de negocio que pueden lograr sinergias si el precio tanto de los paneles como de las baterías para el hogar logran cifras de bajada importantes, lo que supondrá una explosión en la demanda.
La idea de Elon Musk está en que el cliente que se acerque a comprar un coche a una de sus tiendas, pueda recibir información sobre una instalación fotovoltaica que le permita cerrar el círculo de su desconexión de los carburantes fósiles. Un "win-win" que está siendo criticado, pero curiosamente una opción de compra que tendrán que votar los accionistas de Tesla, y donde la mayor parte de la cúpula directiva ha decidido mantenerse neutrales en su voto, dejando al resto de participantes que tomen la decisión.
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