En todo el mundo estamos viendo como los países están apostando fuertemente por la energía solar fotovoltaica, realizando grandes instalaciones y marcando precios de récord en muchas de ellas. Sin embargo, en nuestro país el mercado fotovoltaico lleva algunos estancado sobre todo cuando hablamos de plantas comerciales con ventas a red.
En 2012 entró en vigor el hachazo a las renovables, el cual ha paralizado la instalación de nueva fotovoltaica en los años siguientes. En 2013 apenas se instalaron 31 MW, en 2014 fueron 22 MW y en 2015 subieron hasta los 49 MW. En 2016, en cambio, esa cifra se ha quedado en unos pobres 5 MW. Eso sí, hay que tener en cuenta que se trata de plantas de producción de venta a red, y no tiene en cuenta el autoconsumo, ni las instalaciones aisladas de la red.
Respecto al autoconsumo, el sector tampoco está mucho mejor. A pesar de ser un sinsentido, el "impuesto al Sol" ha hecho mucho daño, tanto a nivel mediático como a nivel económico. Con el "impuesto al Sol" cuesta más que salgan las cuentas, y encima la cantidad de burocracia que hay que hacer para legalizar una instalación solar echa para atrás a cualquiera. Eso sí, hay casos en los que los números siguen saliendo. El autoconsumo es una forma para producir tu propia energía para siempre y reducir la factura de la luz de muchas empresas, aumentando su competitividad.
La fotovoltaica no es la única tecnología que está sufriendo en el sistema español. De hecho, no se ha instalado prácticamente nada en todo el año. La fotovoltaica es la única tecnología que ha aumentado un poco con un 0,3% de crecimiento.
La nueva subasta renovable podría cambiar el panorama dela energía fotovoltaica en los próximos años. 3000 MW de nueva potencia instalada y en la que la fotovoltaica tiene muchas papeletas de ser protagonista.
Esperemos que la legislación de autoconsumo también pueda mejorar y derogar el impuesto al Sol, un acuerdo que está en el pacto PP-Ciudadanos pero que todavía no se sabe si se aplicará.
Fuente | REE
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