Uno de los mayores hándicaps de las energías renovables es su intermitencia. A veces hace Sol, otras está nublado. A veces sopla el viento y otras no. A veces llueve en abundancia y otras veces hay largas sequías. Sin embargo, electricidad queremos -necesitamos- en todo momento.
Es por eso que muchos detractores de las energías renovables utilizan el siguiente argumento: "las renovables nunca están cuando se las necesita". Esto es una verdad a medias, ya que puede haber veces en la que no estén y otras en las que sí. Aunque es cierto que no podemos depender solo de las condiciones climatológicas.
Sea como fuere, el hecho de que las energías renovables no sea 100% fiables no quiere decir que los combustibles fósiles sí lo sean. Y sino que se lo pregunten a los ciudadanos de Queensland en Australia, los cuales han visto como en plena ola de calor las centrales de carbón -y algunas de gas-han fallado, de tal forma que no han podido generar electricidad en uno de los momentos con más demanda de todo el año.
Al parecer, las plantas han fallado debido a problemas técnicos relacionados con el exceso de calor, siendo nada menos que 790 megavatios de potencia los que se han quedado fuera de servicio.
Estos problemas han estado apunto de generar un apagón y el mercado ha necesitado recurrir al respaldo de emergencia, llevando los precios del mercado mayoristas de hasta precios de 13.000 dólares el megavatio hora de forma momentánea.
No es la primera vez que el gas y el carbón tienen problemas técnicos en plena ola de calor, cuando la demanda crece empujada por el aire acondicionado. Resulta curioso que las renovables sean normalmente las más criticadas a la hora de desestabilizar la red, cuando en los momentos críticos las energías convencionales también tienen problemas, al menos en Australia.
Fuente | Reneweconomy
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